Una encuesta revela que aún no se está aprovechando el potencial de la IA generativa en el área de riesgos y finanzas.

Cuando la IA generativa captó la atención mundial por primera vez con el lanzamiento de ChatGPT en noviembre de 2022, rápidamente quedó claro que esta tecnología iba a provocar muchos cambios. Al chatbot le llevó solo dos meses atravesar el umbral mágico de los 100 millones de usuarios. Estamos viviendo una enorme ola de IA y muchas empresas lo han asumido rápidamente. Además, muchas de ellas entienden que se trata de una tecnología disruptiva. En la encuesta de McKinsey The state of AI in 2023: Generative AI’s breakout year (La situación de la IA en 2023: el gran año de la IA generativa) participaron alrededor de 1.700 representantes de empresas de todo el mundo, de los niveles medio y alto, así como de los consejos administrativos. 

Pero, ¿aplica esto también a las tareas relacionadas con las finanzas dentro de una empresa?. Cuando se realizó la encuesta de McKinsey, en abril de 2023, un tercio de los participantes indicó que su empresa ya estaba usando IA generativa con regularidad para, al menos, una función empresarial. Según esta encuesta, se utiliza con mayor frecuencia en las áreas de marketing, ventas, desarrollo de productos y servicios, con las áreas de gestión de riesgos, finanzas corporativas y otras siguiéndolas muy por detrás.

Si nos fiamos de los resultados de la encuesta, está previsto que el uso de la IA generativa continúe aumentando en el futuro. Así, más de dos tercios de los participantes asumen que sus propias empresas aumentarán sus inversiones en IA durante los próximos tres años. Ven un potencial inexplorado no solamente para la producción, sino especialmente para la gestión de riesgos. En esta área, las empresas entrevistadas ya habían alcanzado un ahorro de costes por encima del promedio y aumentado sus propias ventas con la ayuda de la IA en el pasado. 

La encuesta de EOS «European Payment Practices 2022» (Prácticas de pago en Europa 2022) ya mostraba que la digitalización es un problema importante en materia de riesgos y finanzas. En consecuencia, quien no se digitaliza termina quedándose atrás en la liquidación de sus créditos pendientes de cobro. Sobre todo, en lo que respecta a la IA hubo unanimidad entre los participantes: poco menos de la mitad (44%) consideraba incluso antes de la introducción de ChatGPT que la tecnología revolucionaría la gestión de créditos en el futuro. Los resultados de la encuesta de McKinsey, al menos, sugieren que se les dará la razón.

En EOS, grupo financiero líder especializado en la gestión de créditos, los empleados están comprobando cómo la IA generativa puede apoyarles en su día a día. «¿Cómo puedo responder más rápidamente a las solicitudes, crear pronósticos confiables y permitir a los equipos un acceso rápido a la información? La IA generativa ofrece posibilidades en múltiples áreas», afirma Paul Baltag, experto en IA y datos de EOS KSI Romania. En este contexto, la tecnología no pretende sustituir ningún trabajo, sino simplificarlo y, de esta forma, mejorar la productividad de los equipos.